En el programa de hoy hemos hablado de la vinculación entre el cómic de Superman, su adaptación cinematográfica y la creación de una magistral banda sonora por parte de John Williams para tal película. En el programa de radio anterior los alumnos de 3º de Diversificación hicieron un recorrido por la obra del magnífico compositor, y en esta ocasión hemos a continuado con su obra, aunque nos hemos centrando, como hemos dicho antes, en Superman.
Pero, como no podemos olvidar que estamos en el espacio "Los recreos musicales", hemos explicado primero a nuestros radioyentes qué es una banda sonora. Así pues, cuando hablamos de banda sonora hacemos referencia a
la mezcla equilibrada de cuatro elementos: el sonido directo (tomado
simultáneamente con las imágenes), los efectos de sonido (creados
artificialmente en estudio), los diálogos (doblaje de las voces grabadas en
estudio) y la banda sonora musical (grabada en estudio). La banda sonora
musical puede estar formada por música compuesta especialmente para la película
o simplemente consiste en la selección de composiciones previamente grabadas, o
la combinación de ambas situaciones. En el primer caso, hablamos de banda
sonora musical original, situación más ideal ya que permite una estrecha
relación entre el discurso de la imagen y el discurso musical y esto es lo que
sucede con la música de la película de Superman. 
Normalmente, en la realización de una partitura original para una
determinada película, el director se reúne con el compositor después de que la
película ha alcanzado su forma visual definitiva. Entre ambos, fijan las pautas
generales de la musicalización de las imágenes, teniendo como base un guión
donde aparecen las distintas escenas en el tiempo. Sobre cada secuencia se
decidirá cuál es el papel de la música, cómo interactuará con la imagen, el
montaje, la dinámica y el argumento; si surgirá de la misma acción, es decir, desde
fuentes sonoras presentes en la pantalla o fuera de campo, o si tendrá un
carácter incidental; si colaborará a definir o acentuar los estados anímicos y
sentimientos de los personajes; y si deberá ubicar cultural, social, histórica
o geográficamente el desarrollo argumental. Con la descripción detallada de
cada secuencia, la entrada exacta y el tiempo de duración, el compositor decide
sobre las melodías, armonizaciones, texturas, instrumentaciones y niveles
dinámicos.
Una vez finalizada la composición y la orquestación, la música se graba en estudio mientras se
proyecta la película en segmentos, cuidando sobre todo el sincronismo con las
imágenes. En las primeras películas el sincronismo se conseguía por medio de un
cronómetro en mano pero posteriormente lo normal ha sido hacerlo por medio de
un “clic track” sobre un copión de la película. El director oye a través de los
cascos una serie de clips cada uno de los cuales separa las secuencias a partir
de las cuales se ha compuesto la música. El copión puede además tener
“taladros” que producen un destello luminoso en la pantalla y “serpentinas” que
son unas líneas diagonales que se mueven en la pantalla de izquierda a derecha que
advierten de que se aproxima la entrada de una nueva secuencia. El paso final sería
la mezcla, difícil labor llevada a cabo por un técnico de sonido, donde la
banda sonora musical se combina con las pistas que contienen el diálogo, el
sonido directo y los efectos sonoros creados artificialmente.
Y después de esta explicación, pasamos ya a la banda sonora de la película Superman, y concretamente al de la música que acompaña a las
principales secuencias de esta mítica cinta:
1. Prelude and main title March. En el prólogo de la película la música comienza
con el sonido de una trompeta que entona cuatro notas secundada por una flauta
como contrapunto melódico. Poco a poco se incorporan clarinetes, oboes, trompas
hasta que los metales y timbales estallan con la fanfarria de Superman. Nos
recuerda a otras fanfarrias de Williams como la de la Guerra de las Galaxias o
la de Indiana Jones ya que su estructura es la misma: breve introducción de
carácter rítmico, un tema principal que consiste en una fanfarria triunfal con
un aire entre militar y burlón, un tema secundario de corte romántico y la
reexposición del tema principal.
2. The Planet Krypton. En la siguiente secuencia la imagen nos
muestra la inmensa cúpula de la capital del planeta Krypton de donde procede
Superman. Si nos fijamos bien, se trata de una maqueta más que evidente ya que
la película se realizó en una época en que la técnica cinematográfica no estaba
tan avanzada como ahora. Pero gracias a la música de Williams, nos dejamos
llevar e imaginar que se trata de una gran ciudad en un lejano planeta.
3. Destruction of Kripton. Superman es salvado por su padre a borde
de una nave construida por él. En la música podemos escuchar dos fragmentos
diferenciados: un pasaje más calmado para el diálogo de los padres y otro más
enérgico para el desenlace final que nos conduce a la siguiente secuencia y que
nos recuerda a algunos fragmentos de la Guerra de las Galaxias.
5. The trip to Earth. Superman viaja a la tierra, su nuevo hogar. El
padre le transmite, a través de registros grabados, todos los conocimientos
necesarios para desenvolverse en la tierra hasta su madurez. Una inquietante
flauta sirve de fondo para que todos los instrumentos, sobre todo los de cuerda,
desarrollen una línea melódica con innumerables recovecos y que imprime el
dinamismo necesario para esta escena-puente.
6. Growing up. Superman es adoptado por una pareja que vive en la
localidad de Smallville. La música cumple una función de dar sentido de
continuidad a los saltos temporales de las imágenes hasta la escena en que
Superman nos demuestra sus grandes poderes cuando se echa una carrera con un
tren. Williams, para esta secuencia, se marca uno de sus típicos scherzos.
7. Death of Jonathan Kent. El padre adoptivo da unos sabios consejos
a Superman. Escuchamos el tema de Jonathan Kent dominado por trompas y
trompetas con sordina que nos transmite
un sentimiento de cariño y nostalgia.
8. Leaving home. Superman siente la llamada de su padre biológico y
decide dejar el lugar donde creció. Se trata de un tema musical más inquietante
debido a la presencia de etéreos coros y arpas. La despedida carece de diálogos
ya que la música se encarga de “relatar” la escena.
9. The fortress of solitude. Superman viaja hacia tierra de nieves
perpetuas y construye su nuevo hogar a partir de un fragmento procedente de
Krypton. Escuchamos el tema del planeta Khypton pero más oscuro e imprevisible
junto a unos glissandos ascendentes que refuerzan las imágenes. Continúa con
una escena-puente donde el padre biológico de Superman le transmite algunas enseñanzas
en diferentes registros. Aquí la música es puro acompañamiento y está
interpretada con una dulzura que nos remite a ciertos pasajes de otra obra
maestra de Williams, E.T. Una vez terminada la secuencia, Superman aparece con
su característico traje y alza el vuelo por primera vez, a la vez que volvemos
a escuchar el tema de Superman. De esta forma, Williams marca con claridad el
final de la primera parte o primer acto.
Y un apunte más: hay que destacar que el programa de este lunes lo han conducido magistralmente Celia Bueno y Javier Tinoco, quienes han compartido distintas visiones de Superman, fundiendo con sus comentarios la música, el cine, la literatura y el recuerdo de un superhéroe que marcó nuestra infancia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario