jueves, 19 de mayo de 2011

Popkesí: Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán (C.R.A.G.)

Hoy dedicamos nuestro espacio al grupo de culto por excelencia del pop español: Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán, también conocidos por sus siglas: C.R.A.G. que funciona de manera intermitente, y no siempre con todos sus componentes, desde 1974.



Es de esos grupos siempre bien considerados por la crítica pero relegados a un segundo plano por el gran público. Lo que sí es cierto es que unieron unas composiciones brillantes de letras inteligentes con el mejor juego de voces masculinas que jamás haya tenido un grupo en España. Para su nombre tomaron como referencia a los americanos Crosby, Stills, Nash & Young. Todos sus integrantes ya tenían notable experiencia musical: José María Guzmán y Rodrigo García venían de Solera, Adolfo Rodríguez, de los Íberos y Juan Robles Cánovas, de Franklin.

Su disco de debut, “Señora Azul” de 1974, está considerado de forma unánime como una auténtica obra maestra adelantada a su tiempo. La revista Rockdeluxe lo situó en 2004 en el puesto número 11 entre «Los mejores 100 discos españoles del siglo XX» y la revista Efe eme lo coloca en 2º lugar. Lamentablemente, fue un fracaso comercial a pesar de la calidad de sus temas y la producción de Rafael Trabucchelli. El sello Hispavox apostó poco por ellos y la promoción fue casi nula. Debido a esto, les fue imposible hacer actuaciones por su cuenta, lo que unido a las tensiones internas propias de un grupo formado por cuatro personalidades tan fuertes y tan individualizadas les llevó a su primera disolución. Hemos seleccionado sus dos canciones más conocidas: Señora azul, considerada por muchos como una crítica a la dictadura, y más en concreto a la censura todavía imperante en aquellos años, pero en realidad atacaba a la crítica musical y una de las canciones más bonitas y conmovedoras de la historia de la música española, también de Rodrigo García, Sólo pienso en ti.
Una década después, ya convertidos en grupo de culto, C.R.A.G. se vuelven a reunir para grabar nuevo material. El impulsor es Rodrigo, que convence a los demás componentes para un nuevo regreso. Con la formación original al completo graban “Queridos Compañeros” en 1984 de la mano de Gonzalo García Pelayo. Las armonías vocales siguen intactas pero el sonido se hace más ochenteno con el uso del sintetizador y el vocoder (un sintetizador de voz que aquí causó furor en los primeros 80 y que en este grupo, con unas voces tan fantásticas, no era necesario).
De este disco hemos elegido De piel trigueña y Queridos compañeros donde el cuarteto hace un repaso de los diez años que han pasado entre su primer disco y éste. Es un tema lleno de una profunda melancolía y, al mismo tiempo, de un sincero agradecimiento por la amistad fraguada a lo largo de los años. En este disco se echa de menos el sonido más atemporal del anterior y el punto socarrón de sus letras.
Al año siguiente lanzan su tercer álbum “C.R.A.G. 1985” donde todo cambió ya que la directiva del sello Polygram era diferente y el grupo no tuvo tanto margen de actuación. Es una grabación claramente continuista en las que se posicionan sobre temas polémicos como la eutanasia, la homosexualidad, la libertad de la mujer y el estilo de vida alienante y sumiso. Los dos temas escogidos son Necesito tenerte y Espejito mágico. En esta ocasión el grupo tampoco sale de gira y una vez más, desavenencias internas llevan a una nueva disolución del grupo. Este disco sería, a la postre el último con la formación original al completo y es que, visto lo visto, mantener un supergrupo donde todos componen, tocan algún instrumento y cantan debe ser muy difícil, sobre todo, cuando todos tenían, además, demanda como músicos de estudio o de directo. C.R.A.G. no imitaba a nadie, no se parecía a nada y pese a su prestigio, tampoco ahora llegaron a consolidarse en el mercado.
Una tercera reunificación se produjo casi diez años más tarde, en el 94, pero esta vez sin Cánovas, llamándose el disco: “Rodrigo, Adolfo y Guzmán”, editado por un pequeño sello, JJ Records. En esta ocasión sí realizan una gira de conciertos. Las canciones de este disco no alcanzan el nivel de los anteriores trabajos del grupo pero, como siempre, tiene momentos buenos como Canción seria de la primera cita o Querida Pitonisa, una de las creaciones más trabajadas de Rodrigo, cantada con esa voz tan peculiar. El disco se distribuyó poco y se descatalogó pronto, siendo en general difícil de ser encontrado.
Ya en 2005, otra sorpresa: por los 30 años de Señora Azul, la EMI edita un recopilatorio-homenaje a toda su carrera, “Gran Reserva. 30 Años” donde se pueden encontrar temas de las formaciones en las que han estado los cuatro componentes. En el DVD están sus pocas apariciones televisivas y un pequeño documental sobre el grupo. Para la ocasión se reunieron otra vez los cuatro realizando algunas actuaciones ¿Habrá un nuevo disco para 2014?. Esperemos, porque entre los cuatro acumulan centenares de canciones inéditas y, cuando se juntan, surge la magia.


Fuentes:Román, Manuel. Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán. Todas sus grabaciones para Discos Polydor (1984-1985). Ed. Rama Lama (libreto anterior).
Manrique, Diego A.: "La extraordinaria vida secreta de CRAG", El País, 29-06-2005
Lamet, Juan Manuel: "El concierto familiar de CRAG", El Mundo, 14-12-2007
Macho, Roberto: "CRAG, el grupo de culto por excelencia del Pop español", La Fonoteca.net

2 comentarios:

Rosa María Calderón dijo...

"SOLO PIENSO EN TI, SOLO PIENSO EN TI...". Gracias por incluir en el programa de hoy una de las canciones más bonitas del panorama musical español. Su letra es pura poesía. Muchos conocen esta maravillosa canción por la versión que hizo Miguel Bosé en su momento, pero en este caso la original de Cánovas, Rodrigo, Adolfo y Guzmán es inmejorable e insuperable.

Gracias también, porque con tu programa nuestros alumnos conocen otros grupos y otros solistas que están fuera del panorama más comercial de la música pop en español. Esto forma parte también de la cultura y de la formación integral del alumnado.

Alfonso dijo...

Muchas gracias por tus palabras.